El día 2 de Marzo de 2013, se realizó un viaje a Madrid para hacer dos visitas culturales guiadas.
Por la mañana se visitó el Museo Nacional de Artes Decorativas. Creado en 1912 con el nombre de Museo Nacional de Artes Industriales, la primera colección, que comprendía unos mil quinientos objetos, se ubicó en seis salas en un piso de la calle Sacramento. En 1932, se trasladó a su actual sede en la calle Montalbán, un palacete de tres pisos que había sido erigido por la Duquesa de Santoña en el siglo XIX. En 1962, edificio y colecciones fueron declarados monumento histórico artístico.
Este museo cuenta con sesenta salas, en las que se distribuyen unos quince mil objetos, de los cuarenta mil que componen la totalidad de la colección. Aunque tiene una importante colección de objetos originarios de China, las artes decorativas occidentales son las más abundantes, e incluyen artes del fuego (cerámica, loza, porcelana, vidrio), mobiliario, textiles, orfebrería y metalistería, marfiles, cordobanes y guadamecíes, nacimientos, obra sobre papel y algo de pintura y escultura.
Por la tarde la visita fue a la exposición “Pompeya, catástrofe bajo el Vesubio”.
Instalada en el Canal de Isabel II, es una auténtica fotografía de cómo se vivía hace ahora dos mil años. Formada por más de 600 piezas, la exposición quiere cumplir dos objetivos. El primero es mostrar qué supuso la erupción volcánica para una ciudad llena de vida. Los objetos de uso cotidiano, las pinturas y los restos orgánicos que la catástrofe ha permitido conservar son de una calidad arqueológica inigualable. El segundo objetivo es valorar la figura de su descubridor, el “Rey Arqueólogo” Carlos III que fué el descubridor y auténtico impulsor de las excavaciones en Pompeya.